jueves, 26 de febrero de 2009

No hero in her skies

He olvidado lo que se siente tener un millar de mariposas furiosas en el estómago... esa casi náusea placentera que es enamorarse. La última vez que lo hice sentí la mitad de cosas que la vez anterior y un cuarto de lo que sentía la penúltima vez.
Sueño todas las noches con alguien que en nada se parece a la gente que conozco. ('Til I find somebody'). Sí, la vida es benevolente conmigo la mayoría de las veces.
Ser deseada por adolescentes calientes me hace sentir tener la sartén por el mango. Cada vez que me gritan 'bombón' o 'mamacita' cuando voy por la calle (sí, por fin me acostumbré a eso también...) me siento fuerte...
Pero cada vez pienso si en algún lugar lejano, si en algún punto y en algún momento habrá alguien esperándome que me haga de nuevo temblar las piernas, que se convierta en el objeto de mi deseo y que me inspire... ¿Habrá alguien por quien pueda volver a perder la cabeza?
A veces pienso que ese sentimiento emocionante sólo era producto de las hormonas y que ahora es imposible sentir de nuevo ese poder inmovilizador con la misma fuerza...
Y me pregunto si en estos momentos no sería prudente dar la razón a quienes han dicho que soy depresiva... (mientras no me llamen deprimente...) ¿Será tonto buscar revivir ese perder la cabeza? ¿Será inútil? ¿Será el síndrome de Peter Pan? Tal vez me niego a creer que he crecido y que parte de lo que he tenido que dejar atrás sea ese sentir tan profundamente. ¿Me estaré volviendo una piedra?
Carajo, sólo quiero alguien que me inspire a hacer cosas que hace mucho o nunca haya hecho, pero ya nada ni nadie me emociona así... No hay héroes ya.