miércoles, 20 de junio de 2007

Periodo de "aceptancia"

Bueno, pues ya, se acabaron los dramas en cuanto al problema del muerto. Finalmente lo vi. Sólo que antes de verlo no le dije a nadie. Pero es que varias cosas han pasado estos días que me han hecho pensar y crecer y pensar que he crecido.
Cuando estaba recién comenzada la bronca, yo me preguntaba para qué me buscaba y juraba que no quería volver con él y puro drama, ¿no? Pero conforme ha ido pasando el tiempo, me he tranquilizado. Después estaba con que me encantaba que me dijera que yo era lo max de lo max para él. Después vino la onda del encabronamiento porque veía que estaba echando las cosas a perder con su nueva chica, a la que decía que adoraba. Finalmente y luego de tanto pancho, hoy lo ví y terminaron de caerme muchos veintes:

Hay gente que se vuelve Imborrable en nuestra vida. Gente que nos ha marcado tanto y tan hondamente que se vuelve referencia forzada de todo lo que hacemos y vivimos. Hay veces que por más que luchemos por sacarnos a alguien del corazón, sólo logramos enterrarlo más hondo. Sé que no quiero estar con él ahora, pero también sé que eso podría cambiar de un momento a otro. Por lo pronto, somos amigos, nos hablamos con la verdad, nos jalamos las orejas cuando la estamos regando y nos queremos. Pero es un amor limpio, pues sabe que estoy con alguien y yo sé que él en este momento está con alguien aunque acabe de romper con ella. No siento necesidad de darle besos o de hacerle el amor. Me gusta hablar con él y podemos hablar de todo. Sé que eso cambiaría si volviéramos a estar juntos, así que como nunca hemos sido amigos, ahora lo estamos siendo y creo que eso nos da mucha más paz que cualquier otra cosa. Aprendí a aceptar que hay cosas que no puedo cambiar, como el hablar siempre de él y que esté aunque no esté físicamente, como el escuchar una canción e inmediatamente pensar en si le gustaría o no, preguntarme qué estará haciendo de su vida y si será feliz...

Sé que ahora no quiero cambiar que esté en mi vida, le guste a algunos o no.

lunes, 18 de junio de 2007

No estoy de humor

Pues con Jelipe las cosas mejoran. ¿Que como le hicimos? Fácil, la cercanía ayudó, sin embargo, ni él ni yo estamos 100% contentos con lo que somos ahora.
Creo que me volví una viejita amargada o él retrocedió unos 5 años en su crecimiento. Pero como no estoy de mucho humor para escriir, he aquí una lista de las cosas que me enojan de todo en este momento:
1. Subirme a un pecero. No sé si los cabrones que manejan se volvieron más idiotas mientras no estuve o de plano es verdad de que en el pasaje va su vida...

2. Que me vean como si fuera bicho raro. Incluso dentro de mi cuadra, salgo a la calle y la gente parece que vio un fantasma o me hacen creer que traigo mocos colgando de la nariz.

3. El ruido. Si antes me sacaba de quicio, ahora no sé cómo definir lo que el ruido me produce, sobre todo cuando es un borracho idiota que grita como si con el grito se le fuera a bajar un poco la peda para seguir chupando o los radios a todo volumen de mi papá, llenos de gente que balbucea cosas incomprensibles y hace ruido.

4. Subirme a un taxi en la noche. Después de lo que le pasó a Yahui, yo no me quiero arriesgar, además de que me cae que en este lugar no me siento segura.

5. No sentirme segura.

6. Que mis papás hayan adquirido nuevos vicios fregativos, como la controlada de las horas de llegada, las llamadas de teléfono (¿quién te habló?) y el querer saber hasta el último detalle de mi vida francesa (¿y la mantequilla es igual que aquí?)

7. Que Jelipe pregunte todo el tiempo si ya no lo quiero porque no estoy a gusto.

8. Que no existe minuto en el día en que pueda estar tranquila, dado que mis papás entran a mi cuarto como si yo no estuviera ahí.

9. Que ya no puedo comer chile como antes. Ahora, cada vez que se me pasa la mano, me da chorrillo...

10. Que no me encuentro y no me encuentro y no me encuentro.

11. Que hay gente que sólo me busca para preguntarme "¿y qué me trajiste?" ¡Putain! ¿Cuando diablos van a entender que prefiero gastarme el dinero en mi misma y no en otros?

12. Que la gente en general me molesta y me parece pendeja... De no ser por Jelipe y por Yahui, ya me habría puesto un tiro.

13. Que siento mi espacio vital invadido con tanta pinche gente que hay aquí (¿Cuándo van a hacer caso al seguro social y se van a hacer la vasectomía o la ligadura de trompas? ¿Cuándo van a empezar a hablarles derecho en las escuelas para que no haya tanta escuincla mocosa que ya es madre? ¡Me lleva! Si no hay dinero para continuar la escuela, pues ¡menos para tener un hijo!)

Y un sinfín de cosas que ya no puedo seguir nombrando porque nomás me pongo de malas... ¿Cuándo se me va a quitar esto?

Seación de berdades (sic)
Pues empezando por ahí, ¿no? No has crecido. Todavía ni siquiera aprendes a escribir... ¡chingá, ya es tiempo de que crezcas!
El muerto sigue dando patadas de ahogado. Manda sms e insiste en que hablemos y/o nos veamos (claro, como ahora ya se quedó sin chica...) Se escuda detrás de que somos amigos. Se escuda detrás de que según esto soy su alma gemela.
Ayer hablamos como 1 hora y media por teléfono y todo para que me contara todo el chisme de su chica. Ya no me dan celos, hubo un tiempo en que sí los sentí. Siento que a ella no le interesa y él se aburre. Lo que sí me da es hueva, y mucha. Veo con tristeza que he crecido, que ya no soy ni la sombra de quien era hace apenas dos años, pero él sigue clavado en lo mismo. Sigue con la onda de despedirse trágicamente y chantajear a sus víctimas, sique con la onda de "estoy deprimido, ni siquiera me he levantado para ir a trabajar" Y se lo dije "chale, no cambias... sigues siendo el mismito que se despide con la promesa de volver... ¿por qué no dejas a la gente tranquila seguir con su vida? ¿Por qué hemos de vivir con el miedo de que vuelvas? Pues tú quieres volver, pero chance y de quien te despides no quiere que vuelvas..."
Zas
Se quedó en absoluto silencio.
Estamos a años luz de crecimiento.
¿Y qué me contestó?: "Me doy cuenta que tú y yo ya no podremos estar nunca juntos... ¡qué irónica es la vida!"
Pos no, la vida no es irónica, tú eres un baboso que no sabe despedirse, eso es todo. Si no funciona, pues no funciona... a fuerza, ni los zapatos entran.
Y hoy, quería que nos viéramos a como diera lugar. Yo estaba con Jelipe y no podía salirle con un: "¿adivina a quién vamos a ver?" Cuando sabe la historia y sabe todo... todo por que necesitaba abrazos. ¿Y lo que yo necesito, cuándo? Necesito mi tiempo con Jelipe.
¿Por qué no puede entender que el ser parte importante de mi vida no significa que cuando me lo pide, se lo voy a dar todo y hasta voy a poner mis necesidades en segundo plano para estar con él? Chale... chale y ¡chale!

lunes, 11 de junio de 2007

Ora sí ya valió

Yo creo que al fin llegamos al principio del fin. Me cuesta aceptarlo, pero ya no soporto mucho tiempo las tonterías de Jelipe. Sus bromas idiotas, sus comentarios quesque ácidos, su risa tonta que sale en los momentos más oportunos...
Fue tan bonito, pero creo que se acabó, otro más con el que salgo del chongo...